Reputación digital: qué es, cómo gestionarla y qué estudiar para dedicarse a ello

La reputación online es la meta de muchas empresas. Una buena reputación online sube los índices de ventas, mientras que una mala gestión de la imagen digital atrae rumores negativos, quejas y puede significar la perdida de grandes sumas de dinero. 

Sin embargo, hay mucha confusión sobre qué es exactamente la reputación online cómo podemos gestionarla mantener una buena relación con nuestros clientes. Por ello, vamos a arrojar un poco de luz sobre este término, así como cuáles son los pasos a seguir para construir una buena imagen digital.  

Si también te interesa trabajar en este sector, y no sabes por dónde empezar, sigue leyendo. 

Reputación online definición 

La reputación online es el prestigio o estima que tiene una persona o marca en internet. Dicho de otra forma, la reputación online está conformada por todos aquellos elementos que conforman la imagen online de una persona o empresa. 

En el ámbito más laboral, se suele confundir la reputación online con todas las acciones sociales que una marca realiza, cuando la realidad es que la reputación online va mucho más allá. De hecho, la reputación online no está del todo bajo el control de las marcas, sino que todos los usuarios pueden contribuir a la creación de la reputación online.  

 Aquellos factores que contribuyen a la reputación online son:  

  • Factores internos: son todas las acciones que desarrolla la propia marca tanto online como offline.  
  • Factores externos: se trata de todos los datos que aportan los clientes o usuarios a la marca como comentarios, opiniones, imágenes, etc. 

Actualmente mantener un buen prestigio online es fundamental para el crecimiento de muchas empresas, ya que una buena reputación online te asegura: 

  1. Atracción de nuevos clientes.  
  1. Fidelización de clientes antiguos y nuevos.  
  1. Una mayor confianza en tus productos y tu marca.  
  1. Un aumento de tus ventas. 

Gestión de la reputación online 

Debido a todos los beneficios que trae una sana reputación online, hay muchas empresas que buscan gestionar correctamente su prestigio digital. Si quieres ayudar a mejorar la reputación online de tu empresa, toma nota de los siguientes puntos:  

1. Contrata profesionales que sepan sobre reputación online 

Necesitas gente que conozca el entorno digital a la perfección y sepa moverse naturalmente en él. Que se sepa los códigos y cómo expresarse en el medio online.  

Se trata de un tipo de formación muy especifica que se imparte en las escuelas de negocios más prestigiosas de España, por lo que antes de delegar está función en cualquier persona, lo mejor es que contar con el profesional indicado que llevará tu imagen digital y podrá cumplir con los objetivos que buscas. 

Este profesional se llama community manager, y hablaremos este perfil más adelante. 

2. Piensa en modo empresa 

Cuando te encuentres con un comentario negativo en Twitter, no te deprimas ni explotes. No es nada personal. 

Esto es importante que lo mantengas en mente, porque todo lo que se dice en internet queda registrado y es muy difícil de borrar, por eso no debes caer en provocaciones o discusiones con otras personas que no piensan igual que tú.  

Si logras pensar en modo empresa evitarás muchos dolores de cabeza y crisis de reputación. 

3. Crea un blog e incrementa tu reputación online 

Crea diferentes tipos de contenidos, entre ellos entradas de blog. Aunque no lo parezca, el blog es un buen lugar para probar tus conocimientos y aumentar tu autoridad en tu área de influencia, lo que tendrá un efecto directo en tu reputación online. 

Si creas contenidos atractivos e interesantes, tus clientes van a querer leerlos, hablarán bien de ti, los divulgarán, más personas te conocerán y tu reputación online crecerá. Es un círculo virtuoso. 

4. Incrementa la presencia dentro de tu propio sector 

No solo es importante que llegues a tu público, sino que te des a conocer en tu ámbito laboral, ya que esto te servirá para formar nuevas alianzas en el futuro. Así que acude a eventos y gana reputación frente a tus competidores. Tus clientes también lo percibirán como algo positivo. 

Community manager qué es y cómo funciona 

Si has descubierto que te interesa manejar redes sociales, interactuar con los usuarios, crear contenido atractivo, interesante y de calidad, y gestionar y mejorar la reputación online de una empresa… Entonces te recomendamos que estudies para ser community manager.  

Como indica su nombre un community manager es un profesional es maneja una comunidad, en este caso la online. Se encarga de interactuar y gestionar las redes y la reputación online de una empresa. Para ello, hace uso reconocimientos tan específicos como la planificación y ejecución de contenidos para tener presencia en internet.  

El community manager también tiene que contar con unas buenas dosis de ingenio para estar siempre a la última de las tendencias y utilizarlas para mejorar la relación con los usuarios y aumentar la fidelización. 

Por último, pero no menos importante un buen community manager debe tener mucha empatía para poder interactuar con los usuarios y mejorar la reputación online. 

Qué estudiar para ser community manager 

Para ser community manager se requiere tener un extenso conocimiento de las dinámicas que hay en las redes sociales, cuestión que podrás aprender en el Curso Superior en Community Manager en el que adquirirás de forma práctica todo lo que necesitas saber para manejar, mantener y mejorar la reputación online. 

Además, también sabrás cómo responder a una crisis de reputación online de manera rápida y efectiva. Te convertirás en el profesional que todas las empresas querrán contratar. 

Cómo hacer benchmarking

En un mundo donde existe una gran competitividad, las empresas tienen que estar constantemente actualizándose: deben comprender en todo momento el entorno en el que se mueve, y actuar en consecuencia para seguir siendo las mejores de su sector. 

Y es allí donde el benchmarking cobra protagonismo. 

¿Qué es el benchmarking? 

El benchmarking es un término anglosajón que significa “evaluación comparativa» Es decir, el benchmarking consiste en evaluar, comparar y analizar los procesos, productos, servicios y demás aspectos de tus competidores, para tomarlos como puntos de referencia en tus próximas estrategias.  

Es este análisis profundo lo que distingue al benchmarking de otros análisis, pues al realizar una investigación detalla de tus competidores aprendes cuáles son sus mejores prácticas para integrarlas en tu día a día y mejorar tu desempeño.  

Además, esto te permite conocer a tus competidores, y saber en qué fallan o en qué determinado aspecto no están satisfaciendo a sus clientes, de tal manera que tu empresa puede llenar ese hueco y ampliar su público objetivo. 

Hay que entender que el benchmarking es un proceso continuo que las empresas deben aplicar para siempre estar a la vanguardia e innovar. Esa es la razón por la que las empresas deben ser lo suficientemente flexibles y adaptables a los cambios. 

Tipos de benchmarking 

Dado todos los beneficios que aporta el análisis benchmarking, es natural que se hayan inventado para posibilitar la transformación y el crecimiento empresarial en varios ámbitos. 

Benchmarking interno 

Es uno de los benchmarking más enseñados en las escuelas de negocios más prestigiosas de España. Y tiene una razón. En este tipo de benchmarking no verás a tus competidores. 

Aquí el estudiado es tu compañía o más específicamente los distintos departamentos que conforman tu organización, lo cual sirve para determinar tu desempeño, las prácticas que deberían mantenerse y las que deberían eliminarse.  

El benchmarking interno se puede realizar en cualquier momento, pero el más común es cuando estás preocupado por tu rendimiento empresarial. Por ejemplo, si las acciones de marketing están cumpliendo sus objetivos, pero el departamento de ventas no, el benchmarking te ayudará a ver los puntos que tienen en común estos dos equipos para que puedan unirse, y mejorar juntos los índices de productividad. 

Benchmarking competitivo 

Este benchmarking se hace para saber la posición de nuestra empresa con respecto a sus competidores. Es ideal si queremos posicionar nuevos productos o servicios. 

En el benchmarking competitivo se compara el rendimiento actual de la empresa con el de tu competencia, para detectar fallos y arreglarlos. De hecho, el benchmarking competitivo es muy conocido entre las empresas, ya que les permite estudiar el método de trabajo o la tecnología que posee su competencia, para luego probarlas en su propia organización y evaluar el desempeño. 

Para recolectar dicha información existen varias formas:  

  • Directa: antiguos empleados, clientes y proveedores. 
  • Indirecta: internet, publicaciones, catálogos o estudios de productos. 
  • Cooperativo: intercambio de información entre las empresas competidoras. 

Benchmarking funcional 

El benchmarking funcional, a diferencia del benchmarking competitivo, es más amplio.  

Con esto nos referimos a que, si quieres aplicar este tipo de benchmarking, no solo tendrás que fijarte en tu competencia directa, sino en empresas de otros sectores que están haciendo las cosas excepcionalmente bien para aprender de ellos. 

Benchmarking genérico 

Se parece al benchmarking funcional, salvo una cosa: en el benchmarking genérico solo se fija en los logros. 

De esta forma, compararás tus logros con lo mejor que exista en tu sector, ya sea en funciones o procesos afines, y adoptarás los métodos de este competidor para mejorar. 

Fases del benchmarking 

Para aprovechar un benchmarking al máximo hay que tener muy claro las fases que tiene y qué pasos hay que seguir en cada una.  

Esto lo puedes aprender a base de ensayo y error. Pero, si quieres ahorrarte tiempo, mejor estudia un Máster en Administración y Dirección de Empresas que te ayudará a analizar los aspectos positivos y negativos de tu compañía, e implementar los cambios necesarios. 

En todo benchmarking que se precie debes de: 

  • Planificar exactamente lo que se comparará y frente a quién tendremos que compararnos. Parece obvio, pero no lo es. De hecho, esto definirá el éxito o fracaso de tu benchmarking.  
  • Pensar detenidamente cuáles son los datos a recolectar y cómo lo haremos. 
  • Comparar los niveles de desempeño de las compañías, así como los diferentes procesos que se llevan a cabo en las dos para ver los márgenes de mejora.  
  • Incorporar los nuevos cambios para mejorar nuestros resultados de productividad.  
  • Evaluar si los cambios introducidos surtieron efecto o no. 

¿Cómo aplicar el benchmarking en una empresa? 

Para aplicar correctamente un benchmarking en una empresa hay que seguir los pasos en que hemos descrito anteriormente. En la primera fase, primero debemos identificar a nuestros competidores y decidir qué se comparará.  

A continuación, hay reunir la mayor cantidad de datos sobre ellos. Estos datos pueden ir desde los perfiles de los empleados hasta la forma que se toman las decisiones. Para hacerlo, utilizaremos todos los canales que podamos, es decir: directo, indirecto y cooperativo. Una vez que ya tenemos los datos, tenemos que organizarlos para empezar el análisis y revisar la información obtenida.  

A la hora de analizar, hay que asegurarse que todo el equipo conozca los datos profundamente para que la comparación sea lo más rápida posible. Al final, los procesos que sean más compatibles con tu empresa serán los que se incorporen a las rutinas laborales.  

Finalmente, cuando las prácticas ya estén establecidas y haya pasado un tiempo, toca evaluar de nuevo a ver si hay un aumento en la productividad o no. 

Qué es un plan de medios

Tienes un producto muy interesante, que va a facilitar la vida a muchas personas. Ahora solo necesitas que llegue a tu público objetivo. Y para eso es importante un plan de medios. 

Un plan de medios es un documento en el que versa toda la estrategia que va a seguir el departamento de marketing para realizar campañas, llegar a una audiencia y lograr los objetivos 

No hay que confundir el plan de medios con el plan de marketing. El plan de medios se suele realizar cuando se quiere lanzar un producto especifico o cambiar la percepción que se tiene de una marca. Mientras que el plan de marketing es un documento mucho más amplio, en el que se vierten los valores de la empresa, los objetivos a alcanzar, un análisis extenso de todos los públicos a los que se dirige y qué canales utilizar para llegar a ellos.  

Por tanto, si bien son distintos, el plan de medios bebe en gran medida del plan de marketing y utiliza esa información para adaptar su estrategia de medios. 

Estrategia de medios 

La estrategia de medios es otro nombre que recibe el plan de medios. Sin embargo, la estrategia de medios también puede hacer referencia a un aspecto más específico de una campaña de marketing: es la selección y contratación de medios en los que mostrará tus piezas publicitarias.  

Estos espacios son escogidos en base a los objetivos de la campaña, así como los canales que consume el público objetivo según su nivel socioeconómico, su género o su edad.  

En este artículo haremos referencia a la estrategia de medios como sinónimo del plan de medios.  

Cómo hacer un plan de medios 

Hay muchas maneras de elaborar un plan de medios, no obstante, en las escuelas de negocios más vanguardistas se suele utilizar un modelo que permite conseguir los objetivos maximizando los recursos con los que contamos.  

Para aprovechar todos estos beneficios el plan de medios debe tener:  

  • Unos objetivos claros, medibles y alcanzables.  
  • Un análisis detallado de la audiencia a la cual nos dirigimos.  
  • El mensaje que se quiere comunicar y cómo se transmitirá. 
  • Los medios y los canales por los que se verá tu campaña. 
  • El formato elegido para cada canal. 
  • La duración de la campaña. 
  • Los parámetros con los que medirás los resultados.  

Estrategia de medios ejemplo 

Para que estos puntos no se queden en pura teoría, vamos a plantear un ejemplo práctico que dará respuestas a todas las fases por las que pasa un plan de medios cuando se elabora.  

1. Objetivos del plan de medios 

Imaginemos que queremos vender un móvil. Lo primero que tenemos que plantearnos son los objetivos de la campaña. 

  • ¿Queremos darnos a conocer como marca? 
  • ¿Buscamos que nuestro público conozca las bondades del móvil? 
  • ¿Queremos aumentar los índices de venta? 

Sea cual sea nuestro objetivo, tenemos que expresarlos en datos medibles y alcanzables. Es decir, si buscamos elevar las ventas en un 3%, ¿cuánto tiempo haría falta para lograrlo? En función de eso, decidimos el tiempo que la campaña estará exhibiéndose y lo que estamos dispuestos a gastar.  

2. La audiencia 

Una vez que eso está claro, tenemos que pensar el público al que nos dirigiremos: a quién le podría interesar nuestro móvil, qué edad tiene, cuál es su nivel socioeconómico.  

Si hace falta puedes entrevistar a personas que creas que estarán dentro de tu audiencia, y descubrir qué les llama la atención del producto.  

Sabemos que segmentar la audiencia no es fácil, por lo que si quieres aprender técnicas con las que siempre determinarás a tu público objetivo, puedes estudiar el Curso Superior en Publicidad. 

3. El mensaje que guiará el plan de medios 

Cuando ya tienes el público, es mucho más fácil formular el mensaje que vertebrará toda la campaña, así como las acciones publicitarias que se realizarán, debido a que se conocen los intereses y hábitos de consumo de la audiencia.  

Por ejemplo, si tu producto se dirige a adolescentes, investiga las palabras que estos utilizan y manda un mensaje lleno de frescura y juventud. 

4. Los medios y los formatos 

¿Tu móvil se dirige a adolescentes que se la pasan en las redes sociales?  

Entonces tu campaña debe aparecer en estas plataformas. Además, tienes que utilizar los formatos más populares de cada red social, como reels y videos cortos que les hablen de situaciones cotidianas. 

Antes de crear, revisa las tendencias del momento para estar al día de lo que se consume.  

5. La duración de la campaña 

Normalmente a esta altura ya tendrás una idea aproximada de lo que deberá durar tu campaña para alcanzar tus objetivos, pero si no, es hora de fijarla basándote en lo que quieres conseguir y lo que estás dispuesto a gastar. 

En el caso de las compresas, todas las redes sociales cuentan con distintos formatos publicitarios a los que podrás acceder si te haces una cuenta de empresa. 

También es importante que planifiques bien la época del año en la que saldrá tu campaña, ya que hay algunos productos más estacionales que otros, como las afeitadoras eléctricas que, aunque se vendan todo el año, suelen tener su pico en verano. 

6. Medir los resultados 

Puede ser que crees la pieza publicitaria más bonita del mundo, pero lo fundamental es que sea efectiva, y eso se traduce en la consecución de objetivos en el plazo estimado. Para medirlo tenemos que establecer unos parámetros o KPIs.  

Volviendo al ejemplo del móvil, si queremos saber si nuestra campaña ha surtido efecto, tenemos que analizar el número de ventas que hemos tenido desde que inicio la campaña hasta un mes después de que terminó. A su vez, este índice habría que comprarlo con periodos anteriores, para ver si se han incrementado las ventas.  

Plan de medios digital 

Gracias a la expansión del internet, ahora muchas acciones se hacen por vía digital. Esto ha hecho que los planes de medios hayan tenido que adaptarse a este nuevo entorno.  

Afortunadamente, los planes de medios digitales siguen los mismos pasos que el plan de medios tradicional. Así que si estás pensando hacer uno puedes usar de guía el ejemplo que te hemos proporcionado. 

Tipos de financiación de una empresa

Cuando una empresa está comenzando su andadura, una de las cuestiones por las que se preocupan sus fundadores es la financiación. Hay muchas formas de financiar una compañía según las circunstancias. Por eso, si quieres que tu negocio sea un éxito, necesitas conocer todos los tipos de financiación a los que puede optar una empresa para elegir el mejor.  

Y desde la Escuela de Negocios Europea de Barcelona te ayudaremos. 

Qué es una financiación 

La financiación es un proceso por el que se proporciona capital a una empresa o una persona para que lo utilice en un proyecto o negocio. Este dinero muchas veces es invertido en sentar las bases del negocio, lanzarlo al mercado o crear una nueva línea con la que se expandirá a un nuevo mercado. 

En el caso de las compañías la financiación suele provenir de préstamos bancarios o de aportaciones de sus inversores.  

Generalmente, los asuntos relacionados con la financiación son competencia de los departamentos financieros o de contabilidad. Dependiendo del tipo de financiación, las personas que la han recibido tendrán más o menos libertad de movimiento y un tiempo mayor o menor para alcanzar los objetivos pautados. 

Tipos de financiación 

Según cuál sea tu punto de inicio y las metas que quieres alcanzar, podrás optar a una financiación u otra. Para que hagas una buena elección, lo mejor es que conozcas todos los tipos de financiación que existen para tu negocio.  

Antes de comenzar, hay que explicar que existen dos formas de agrupar a los tipos de financiación: de donde proviene y el tiempo que duran. Empezaremos con la primera. 

Tipos de financiación según de donde provenga el dinero:  

  • Interna o propia: es la que proviene de los mismos integrantes de la empresa o proyecto, es decir, de los inversores, dueños o accionistas. También puede ser que el dinero venga de actividades lucrativas o de las ganancias anuales. 
  •  Terceros o externo: son todos los tipos de financiación que tienen como origen entidades foráneas al proyecto o empresa. Por ejemplo, otras empresas, particulares o instituciones. Esta forma de financiación a menudo requiere de algún tipo de validación contraprestación o endeudamiento. 

Tipos de financiación según el tiempo: 

  • A corto plazo: tipo de arreglo que espera recibir resultados en un par de meses. Estos resultados se pueden expresar en dividendos, hallazgos o devolución del dinero. 
  • A largo plazo: en este tipo de financiación, los que han invertido no esperan que los resultados se produzcan en poco tiempo, sino que saben que, para que surta efecto, tendrán que esperar más de un año. Incluso puede ocurrir que no haya que devolver el dinero, ya que son acuerdos desinteresados. 

Por qué te pueden denegar una financiación 

Las entidades no entregan dinero porque sí, quieren saber a qué se va a destinar el capital que les estás pidiendo. De hecho, si conoces las razones principales por las que se deniega una financiación, puedes preparar de antemano tu estrategia de financiación para obtener el capital que necesitas.  

En este apartado resumiremos los motivos principales por los que te pueden negar una financiación. Si quieres saber más, te recomendamos que estudies el MBA en Dirección y Administración de Empresas. 

Dudas sobre la capacidad de pago  

El motivo más obvio y decisivo para denegar cualquier tipo de financiación. La liquidez de una empresa es un indicador directo de su solvencia. Si todavía no tienes un volumen de ventas más o menos fijo, o llevas un tiempo en el mercado y no ha habido ni una sola venta, será una razón determinante para negártelo.  

Endeudamiento elevado 

Si has pedido otros préstamos y no has sido capaz de devolverlos, eso se reflejará en tu deuda. Y si, además, tu deuda es mayor que tus fondos propios es un “no» directo. 

Perdida de negocio 

En el caso que, recientemente tus números de venta han estado bajando y no se ve a futuro que la tendencia se pueda remontar, es un buen motivo para que las empresas financieras te nieguen el préstamo, pues no saben si será dinero perdido. 

Riesgo empresarial 

Si al averiguar en qué se va a usar la financiación, los inversores encuentran que se trata de un producto o un sector de riesgo tendrán más reticencia en aprobar la financiación. Esto también ocurre si hablamos de un nuevo sector laboral. 

Si no presentas avales o garantías, también se considera de riesgo la inversión. 

Empresas de nuevo creación 

¿Eres un emprendedor que está montando su primera empresa? Tendrás más dificultades para obtener un préstamo, ya que no tienes experiencia. Sin embargo, esta no es una razón definitiva y si aportas buenos argumentos, los tomarán en cuenta.  

Qué es la comunicación interna

Una compañía tiene distintos públicos objetivos con los que se comunica para mantener una buena imagen y destacar sobre la competencia. En el caso de la comunicación interna, sus clientes son los empleados, también llamados clientes internos.  

La comunicación interna se realiza con objetivo específico: mejorar los resultados. Y para lograrlo busca motivar e integrar a los trabajadores para que den lo máximo de sí. En definitiva, la comunicación interna es una estrategia para gestionar el equipo humano una empresa a través de informarlo, persuadirlo, recordarle y animarle a cumplir las metas establecidas. 

¿Quieres saber cómo mejorar tus resultados a través de la comunicación interna? Sigue leyendo. 

Objetivos de comunicación interna 

Como se ha mencionado antes, el objetivo principal de la comunicación interna es mejorar los resultados. No obstante, en la Escuela de Negocios Europea de Barcelona, también destacamos otros objetivos igualmente importantes. 

Estos son: 

  • Aumento de la productividad: cuando los empleados poseen la información necesaria y correcta para trabajar, toman mejores decisiones y optimizan el tiempo. 
  • Rapidez en la resolución de problemas: saber cómo hacer el trabajo y lo que esperan de este, acelera el reconocimiento de problemas y la búsqueda de soluciones que los atajen de raíz. 
  • Mejora la relación entre trabajadores: la información proporciona tranquilidad y confianza. Con una buena comunicación interna evitas que los empleados desconfíen entre ellos y mejoras el ambiente laboral.  
  • Incrementas el sentimiento de pertenencia:  el trabajador, al sentirse escuchado, se siente valorado, lo cual aumenta el sentimiento de lealtad y pertenencia a una organización.  
  • Los trabajadores responden bien a los cambios: si hay un clima de tranquilidad y lealtad en el que constantemente se comunica cómo va la empresa, en el momento que haya que hacer cambios o innovar en ciertos aspectos, los colaboradores no solo estarán receptivos, si no que aceptarán los cambios y trabajarán para conseguir los nuevos objetivos.   

Estrategias de comunicación interna 

Para alcanzar todos estos objetivos en el Curso Superior de Comunicación Corporativa apostamos por poner en marcha varias estrategias de comunicación interna. Algunas de estas son:  

  1. Mantén una política de puertas abiertas: brinda un espacio de comunicación seguro para tus empleados, en el que puedan hablar de los retos que encuentran en su trabajo sin verse afectados. Así podrás resolver cualquier inquietud que tengan antes de que esta crezca y afecte a la productividad y al buen ambiente laboral. 
  1. Diversifica los canales de comunicación: cuantos más canales efectivos tengas para comunicarte con tus empleados, más fácil es que ellos te transmitan sus preocupaciones y mejore la productividad. También es importante recordar que no todo el mundo se comunica igual, por lo que con más canales de comunicación lograrás que todo tu equipo entienda las metas y se sienta entusiasmado. 
  1. Empodera los mandos medios: muchas veces sucede que cuando los colaboradores piden ayuda, los mandos medios no son capaces de ofrecerla porque deben consultar con sus jefes y eso retrasa el trabajo. Si le das poder a los mandos medios, ellos serán los que tomen las decisiones que más convengan, porque conocerán más de cerca el día a día de los trabajadores, y agilizarás el flujo de trabajo.  
  1. Se conciso: aunque envíes muchos mensajes para informar del estado de la compañía, lo mejor es que resumas y que tus mensajes sean claros para no quitar tiempo de trabajo. 
  1. Asegúrate de que los mensajes sean recibidos: que envíes mensajes, no significan que sean recibidos. Puedes asegurarte que el mensaje fue entendido si das seguimiento a los mismos. Así garantizas que la estrategia de comunicación interna se cumple. 

Comunicación interna y externa 

Aunque puedan parecer similares la comunicación interna y la comunicación externa de una empresa no son lo mismo. Como indica su nombre la comunicación interna es la que se produce dentro de una organización mientras que la externa es la que utiliza la empresa para comunicarse con sus proveedores, clientes y distribuidores 

La comunicación externa tiene que cuidarse tanto como la interna, ya que de la primera se forja la imagen que tienen los clientes sobre compañía. Y nunca se debe descuidar una por mantener la otra, porque si se ha construido una buena imagen externa, pero el ambiente laboral es malo y la comunicación interna ineficiente, al final se sabrá que los trabajadores son infelices y la reputación de la compañía se dañará. 

Plan de comunicación interna 

Para articular una buena estrategia de comunicación interna, hay que hacer un plan de comunicación interna. Es decir, una guía de las acciones que se van a tomar para mejorar la comunicación interna de la empresa.  

Este documento cuenta de varias partes.  

  • Evaluación del panorama actual. 
  • Definición de objetivos. 
  • Guía de acción para alcanzarlos. 
  • Análisis de los resultados, una vez puesto en marcha.  
  • Cambios que se realizarán. 

Cómo llevar la contabilidad de una empresa

La contabilidad es uno de los aspectos más importantes de una empresa. Llevar la contabilidad en regla es lo que permite saber si una organización es rentable y cómo se está distribuyendo el capital. También con ella se puede saber si hay un superávit y, por tanto, se puede invertir en otros aspectos que ayudarán a la compañía a crecer.  

Estas son algunas de las razones por las que las empresas siempre necesitan de un contable. Por lo que, si te gustan los números y el orden y quieres un trabajo estable, la contabilidad puede ser lo tuyo. 

Qué es la contabilidad de una empresa 

Consiste en el registro de todas las operaciones económicas de una organización a fin de conocer de dónde ha venido todo el capital con el que cuenta, a dónde ha ido y con qué cuenta en este momento.  

En la contabilidad de una empresa, se entiende que en todas las operaciones financieras existen dos partes, también llamadas partidas: el deudor y el acreedor, es decir pérdidas y ganancias. Y para que la contabilidad esté bien hecha, la suma de las partidas registradas de un lado debe coincidir con la suma de la total de la otra.  

En la contabilidad de una empresa, cualquiera que maneje los fondos puede llevar la contabilidad, o lo que es lo mismo, una persona, un grupo, una comunidad de propietarios, una asociación, entre otros.  

Para llevar cierto orden en la contabilidad, en España se desarrolló lo que se conoce por el Plan Genera de Contabilidad

Qué es el Plan General de Contabilidad 

El Plan General de Contabilidad es un documento legal que se creó para regular la contabilidad de empresas en España. Además, sirve para adaptarse al sistema contable del resto de la Unión Europea, facilitando en el camino los intercambios económicos entre entidades de distintos países.  

En el Plan General de Contabilidad no solo se recogen las prácticas de contabilidad más comunes y recomendadas, sino que se hace un profundo análisis del tratamiento que deben llevar las inversiones financieras, inmobiliarias, el fondo de comercio, las subvenciones, las pensiones y las operaciones vinculadas. 

Hay que decir que el Plan General de Contabilidad más reciente data de 2007. Anterior a este existen dos más, el de 1990 y el 1973.  

Dada la extensión de lo que se trata, el Plan General de Contabilidad reciente se divide en: 

  1. Marco conceptual de la contabilidad.  
  1. Normas de registro y valoración.  
  1. Cuentas anuales.  
  1. Cuadro de cuentas. 
  1. Definición y relaciones contables. 

Qué es ‘el debe’ en contabilidad 

Dentro del marco conceptual existen varios principios contables. Entre los más importantes está ‘el debe’.  

El debe en contabilidad comprende todos los ingresos que recibe una empresa y representan un cargo en su cuenta. En el debe se registran todos los incrementos de las inversiones y la disminución de las finanzas, es decir, el aumento de los activos y de los gastos. 

Visualmente se representa en la columna izquierda de las cuentas contables.  

El debe proviene de la época medieval, cuando los banqueros anotaban en sus libros “debet dare” en el momento que alguien dejaba dinero en su depósito. De esta manera, el banquero sabía que “debía” capital y este monto se registraba como ingreso. 

Qué es el haber en contabilidad 

Por el contrario, el haber hace referencia a las salidas y entregas a una cuenta. En este se muestra el aumento de financiación y la disminución de inversiones. Dicho de otra forma, refleja el aumento de pasivos y de los ingresos. 

Al igual que el debe, el origen del haber podemos encontrarlo en los libros de los banqueros en la Edad Media. En ese entonces, cuando un cliente retiraba dinero y tenía esa cantidad, el banquero registraba esa operación con el nombre «debet habere” y registraba eso como una salida de fondos.  

En la actualidad el haber se representa en la columna de la derecha

Libro diario de contabilidad 

Para registrar todas estas salidas y entradas de capital, en la actualidad se usa lo que se conoce como el libro diario de contabilidad, un documento en el que se anotan todas las transacciones diarias de una empresa.  

Si se quiere mantener un orden todas las operaciones deben anotarse día a día, o como mucho en un periodo no superior a un mes. En el libro diario de contabilidad se debe incluir: 

  • Fecha de cada transacción. 
  • Las cuentas involucradas en cada transacción.  
  • El importe de la operación. 
  • Breve explicación de la transacción. 

Aprender contabilidad es imprescindible para acceder a cualquier departamento de administración de una empresa. Pero si lo que quieres es disfrutar de una enseñanza superior en la que te sientas exigido, y en la que realmente te preparen para el día a día de la contabilidad, estudia el Posgrado en Dirección Financiera y Contabilidad de ENEB, la escuela de negocios más pionera de Barcelona.  

5 pasos para estructurar tu idea de negocio rentable

Acabas de salir de la universidad o ya llevas unos años trabajando en tu sector y crees que tienes una idea innovadora, que le resolverá a la vida a muchas personas. Quieres verla triunfar, pero no sabes cómo ponerla en marcha, ni siquiera si es rentable.  

Puedes hacer que cualquier idea de negocio sea exitosa si aprendes los pasos que tienes que seguir para que sea rentable. ¿Estás listo para averiguar si todas aquellas ideas de negocios que tienes se pueden llevar a cabo? ¡Comencemos! 

Qué es la idea de negocio 

Antes de empezar a buscar la financiación y los recursos para hacer tu empresa realidad, tienes que saber si tu idea de negocio es rentable.  

Una idea de negocio es cualquier producto o servicio que todavía no existe y que quieres llevar a un determinado público para obtener un beneficio económico por su uso o adquisición.  

De hecho, desde la Escuela de Negocios Europea de Barcelona decimos que la idea de negocio es el paso anterior necesario para desarrollar un plan de negocio, que será lo que le presentarás a los inversores para recibir la financiación para empezar tu negocio. 

Cómo desarrollar una idea de negocio  

Una vez que ya sabes qué es una idea de negocio, hay que descubrir si tu idea de negocio es rentable, y esto solo se puede hacer si se desarrolla en base a unos parámetros.  

Para saber si tu idea de negocio de rentable tienes que:  

Identificar los aspectos más importantes de tu negocio 

Lo primero que debes preguntarte para saber si tu idea de negocio es rentable es si tu producto o servicio es innovador, qué lo diferencia de los demás y por qué alguien podría necesitarlo. 

Contesta a estas cuestiones con la mayor precisión, porque así sabrás si realmente tu idea tiene cabida en el mercado, si habrá un público interesado en comprarlo y probarlo.  

Estudiar el mercado  

En esta segunda fase para saber si tienes una idea de negocio rentable lo que hay que hacer es estudiar el mercado. Con esto, nos referimos a que debes analizar en profundidad a tu público objetivo: cuántos individuos conforman tu segmento de población, qué edad tienen, cuáles son sus gustos, sus pasatiempos, sus problemas; qué les preocupa y cómo tu proyecto les ayudará a solucionarlo.  

En esta fase también desarrollarás lo que se conoce como el buyer persona o el cliente ideal de tu producto o servicio. 

También es recomendable que investigues a tu competencia y los productos que venden. ¿Ellos logran satisfacer las necesidades que tiene tu público? ¿Cómo lo hacen? ¿Cuáles son sus fortalezas y debilidades? 

Cuando sepas a la perfección el mercado en el que te mueves, es importante que, para que tu idea de negocio tenga éxito, comiences a imaginarte cómo será tu estructura empresarial, qué departamentos tendrá y cómo serán las relaciones entre ellos.  

Esto es importante, ya que dependiendo de la estructura que te plantees disfrutarás de unas ventajas y no de otras, así como permitirás un mayor flujo de ideas.  

En este momento debes también pensar en todos los pasos que seguirás para obtener tu producto. Podrás conocer si tu producto es muy fácil o imposible de implementar si estudias el Máster en Innovación y Empredimiento. 

Analiza los costes económicos y financieros 

Un aspecto nada agradable, pero necesario para saber si tienes una idea de negocio rentable es analizar los costos económicos y financieros para llevarla a cabo.  

Esto significa conocer de cuánto capital dispones y cuánto más necesitas para que la idea de negocio funcione. Esto se traduce en contratación de personal, espacios, recursos, pago de servicio como electricidad o agua, etc.  

De hecho, cuanto más detallado lo tengas mejor, ya que, si estás buscando inversores, estos se podrán imaginar la cantidad de recursos que requieres a la hora de financiarlo. 

Proyecta el crecimiento de tu empresa 

¿Cuánto tiempo necesitará tu idea de negocio para que se convierta en una empresa rentable? ¿6 meses? ¿1 año? ¿2 años? Intenta ser lo más realista posible para que todos sepan qué esperar, especialmente tú. 

Los nuevos negocios son ilusionantes, pero también requieren de buenas dosis de resiliencia. Si estimas cuánto tiempo debes esperar antes de ver resultados positivos, también será más fácil que aguantes las épocas duras.  

Patentar una idea de negocio 

Para asegurarte que nadie utilice tu idea de negocio, puedes patentarla. En España este es un servicio que se realiza mediante dos organismos: el Registro General de Propiedad Intelectual y la Oficina de Patentes y Marcas. 

De todas maneras, no toda idea será aceptada, para ello tendrá que cumplir una serie de requisitos: 

  • Que sea totalmente innovadora, nueva o única.  
  • Tiene que ser inventiva y alejarse de las obviedades.  
  • No puede ser abstracta, se debe poder aplicar.  

Si cumple con estas características, solo tendrás que rellenar una serie de documentos para poder registrarla.  

Si quieres que tu idea tenga de negocio sea rentable, contacta con la mejor escuela de negocios de Barcelona. Te enseñaremos a convertir todas tus ideas de negocio en éxitos empresariales. 

Supply chain manager: la profesión del futuro

La gestión logística no deja de crecer y especializarse. En medio de todos los nuevos puestos y perfiles de trabajo que surgen cada año, hay uno que ha sonado con más fuerza: el supply chain manager. 

Si quieres trabajar en logística, comprender todas las etapas de la cadena de suministro y ayudar a una gran empresa a optimizar su distribución y a fidelizar a sus clientes a través de la entrega de pedidos; deberías convertirte en supply chain manager. 

Qué es un supply chain manager 

Desde la Escuela de Negocios Europea de Barcelona definimos el supply chain manager como un profesional que se encarga de optimizar la supply chain, o lo que es lo mismo, la cadena de suministro. Para ello, gestiona y administra todas las actividades relacionadas con la adquisición, producción y distribución de los bienes de una compañía.  

Esto es muy importante en el panorama actual, pues la presión competitiva global y unos clientes cada vez más exigentes obligan a las empresas a ser eficientes y rápidas y dar un servicio excelente, especialmente en la distribución. Y para ello, se necesita a alguien que conozca a fondo el funcionamiento de la logística. 

Qué hace un supply chain manager 

Debido a su papel de gestor del área de logística de una empresa, el supply chain manager es responsable de:  

Transferir los materiales a quien corresponda 

El supply chain manager debe asegurarse de la transferencia de materiales y pedidos desde el proveedor hasta el cliente, de tal manera que obtenga los mejores precios para la materia prima y acierte en las cantidades para no malgastar el presupuesto.  

También debe tener en cuenta el equilibrio entre la oferta y la demanda para no ocasionar perdidas a la empresa. 

Identificar las tendencias de compra 

Muy importante para saber la cantidad a adquirir de materia prima para elaborar los productos. 

Más aún, si el supply chain manager identifica una tendencia al alza podrá almacenar suficientes productos, para luego atender a todos los pedidos y mejorar la imagen de la empresa.  

Configurar la red de distribución 

Esto lo ayudará a agilizar los procesos. En este sentido, el supply chain manager tiene que conocer la localización de sus proveedores y dónde se encuentran las instalaciones de producción y de distribución. 

Crear una red de distribución  

Para garantizar un envío efectivo y en condiciones, el supply chain manager debe configurar una red de distribución a fin de optimizar tiempos y que los productos y las materias primas lleguen a los clientes y proveedores cuando se les prometió. 

Control de stock 

Una de las funciones más importantes de este puesto. Tener organizado y catalogado el stock facilita la gestión de presupuesto. El capital restante puede aprovecharse en mejorar otras áreas de la supply chain, para optimizar aún más la cadena de suministro y mejorar la imagen de la empresa. 

Gestionar al personal  

En el área de logística trabajan muchas personas, por lo que se necesita una gran coordinación para que los plazos se cumplan y los pedidos lleguen.  

El supply chain manager es el responsable que esto ocurra, y por eso debe tener conocimientos avanzados de gestión de equipo, así como organización y empatía. 

Monitorizar 

El supply chain manager tiene que vigilar que todos los procesos se cumplan a tiempo para que las materias primas y los pedidos lleguen a las respectivas personas y organizaciones. 

Por ello, debe estar al corriente de todo lo que ocurre y de los problemas que surgen para solucionarlos inmediatamente.  

Velar por la imagen de la empresa 

En el contexto actual, el área de logística es sumamente importante para la imagen de la empresa. Si esta falla, la reputación de la compañía se verá muy afectada.  

Esa es la razón por la que la figura del supply chain manager es tan fundamental a día de hoy.  

Por qué ser un supply chain manager 

En esta época en la que hay una competencia tan feroz, ser supply chain manager tiene unos beneficios que no conseguirás en otros puestos:  

  • Trabajo asegurado: la logística es un sector en plena expansión que se espera que siga creciendo a ritmos agigantados durante los siguientes años. 
  • Posibilidades de crecer como profesional: debido a que el mundo se vuelve cada vez más globalizado, más y más empresas necesitan de un supply cahin manager para atender las demandas de sus clientes. Podrás empaparte de experiencia y convertirte en un activo valioso para las compañías. 
  • Puedes trabajar en todo el mundo.  
  • Salario alto: según estudios, de media un supply chain manager gana unos 75.000 anuales y, a veces, puede duplicarse. 

Cómo convertirse en un supply chain manager  

El supply chain manager es un perfil muy polifacético y con muchas habilidades. Debido al entorno en el que se mueve y todas las funciones que cumple, la persona que quiera aspirar a este cargo debe comunicarse con soltura en varios idiomas, preferiblemente en inglés, francés, alemán y español.  

Además, actualmente las empresas demandan que los supply chain manager tengan una buena base teórica que solo se consigue con un Máster en Supply Chain Management. 

Otras habilidades que también se piden es la empatía, la organización, el liderazgo, capacidad de trabajar en equipo y de comunicar lo que se necesita. 

Si quieres impulsar tu carrera, en ENEB te ayudamos a lograrlo con nuestro enfoque práctico, para que desde el primer día practiques todos los conocimientos que adquieras. De esta manera, como supply chain manager sabrás cómo realizar tu trabajo con eficiencia y rapidez. Contacta con la escuela de negocios con mayor salida laboral de España y reserva tu plaza. 

Sabes qué es la programación neurolingüística (PNL) y cómo puede ayudar a tu carrera

Hay muchas herramientas que puedes usar para mejorar tu trabajo diario e impulsar tu carrera laboral: técnicas de concentración, mapas metales, estructuras, entre otros. Una de las que está teniendo más auge, sobre todo en el ámbito empresarial, es la programación neurolingüística o PNL.  

Mucho se ha hablado de los beneficios que la PNL tiene tanto a nivel profesional como personal. Pero para poder disfrutarlos hay que entender qué es la programación neurolingüística, cuáles son sus principios y cómo te pueden ayudar a que tu trabajo sea aún mejor. 

Qué es la programación neurolingüística 

La programación neurolingüística es el estudio del comportamiento del ser humano y que permite la entender la individualidad y las necesidades personales de cada uno, así como sus objetivos y logros a través del desarrollo de habilidades como el autoanálisis o la capacidad de adaptación a los cambios. 

Desde la Escuela de Negocios Europea de Barcelona podemos decir que la PNL nació entorno a los años 70, gracias a dos científicos estadounidenses que estaban interesados en comprender por qué en una misma población, con las mismas habilidades y experiencia, había un grupo que había tenido éxito y otro que no.  

La conclusión fue el principio de individualidad y los cimientos de lo que hoy se conoce como programación neurolingüística, es decir, la singularidad de cada persona y cómo estas características determinan el triunfo o fracaso de una persona. 

Con el fin de cambiar la tendencia de una persona y ayudarle a alcanzar sus objetivos, se establecieron varios principios. 

Principios de la PNL 

Los principios de la programación neurolingüística son la base de todo este método, y es lo que se debe trabajar para mejorar las perspectivas laborales. 

Es la única forma de que la PNL realmente surta efecto, y se vean los resultados que se están buscando.  

Estos principios son:  

Rapport  

Es uno de los principios más básicos de la PNL y quizás el más importante. El rapport es algo tan sencillo como crear una relación con el oyente durante una conversación, la cual está basada en refuerzos positivos que garantizan la apertura y la confianza. Si la relación se mantiene en el tiempo, esta se basará en la tranquilidad y la positividad.  

Para ello hay que realizar una escucha activa y analizar comportamientos, argumentos o la comunicación verbal, y trabajarlos in situ para aumentar la proximidad a la audiencia.  

A nivel laboral, el rapport bien empleado permite que tu público este más receptivo y acepte sugerencias, lo cual te sirve en negociaciones o ventas de productos. 

Comportamiento 

El comportamiento no nos define cómo somos como personas, ya que este es una reacción ante las distintas situaciones que nos encontramos diariamente y variará según nuestro estado de ánimo o cansancio.  

En la programación neurolingüística se sabe que un buen comportamiento en un momento dado puede ser una gran ventaja, por lo que trabajarás cómo controlarlo con inteligencia emocional para enfrentar de forma sabia las adversidades. 

Intención positiva 

Uno de los principios más curiosos de la PNL es la intención positiva, que entiende que detrás de todo comportamiento hay una buena intención. Eso quiere decir que todo el mundo hace lo mejor que puede según sus posibilidades, por lo que los sentimientos de culpa, frustración o fracaso no tienen cabida en la programación neurolingüística. 

Tanto para ti como para los demás. 

Mapa mental 

El mapa mental es la manera que hemos construido nuestro pensamiento a través de los años y miles de experiencias. 

Esto es individual, intransferible y es útil saberlo, pues entenderemos que ante las mismas circunstancias no todos lo evaluaremos igual, y seremos más abiertos ante las distintas formas de pensar. Eso nos ayudará a descubrir nuevas ideas para nuestro trabajo. 

Individualidad 

Quizás el principio de la PNL más sorprendente pues, aunque todos vivimos en el mismo lugar y experimentamos los mismos eventos, no los analizamos y comprendemos igual, por lo que nuestros mapas metales serán diferentes y nuestra personalidad será única.  

Allí reside la individualidad.  

Capacidad 

Para la programación neurolingüística, la capacidad que tenemos de lograr nuestros objetivos no depende de nuestra inteligencia o habilidades sino de las creencias que tengamos sobre nosotros mismos, sobre todo las limitantes.  

Esto quiere decir que bien empleado, la PNL nos permitirá alcanzar todo lo que deseemos.  

Flexibilidad y cambio 

Entre los principales principios de la PNL está la flexibilidad y la capacidad de cambio, una habilidad fundamental si quieres crecer laboralmente. Hay que entender que no podemos controlarlo todo: las personas reaccionarán de formas distintas y ocurrirán situaciones inesperadas. 

Por todo ello, debemos estar dispuestos a ser flexibles y a cambiar para poder aprovechar las nuevas oportunidades que se nos presentan. 

Para qué sirve la PNL 

La programación neurolingüística se puede aplicar a muchos ámbitos. En cuanto al área empresarial, la PNL te ayuda a impulsar tu carrera laboral de la siguiente manera:  

  • Te vuelves un buen negociador y por tanto tus ideas son escuchados e implementadas.  
  • Creas relaciones laborales fuertes y estrechas, algo muy importante para impulsar tu carrera. 
  • Controlas tus sentimientos y comportamiento y eres capaz de mantener el autocontrol aún en situaciones de mucho estrés.  
  • Transmites seguridad y positividad. Ideal para puestos de responsabilidad.  
  • Entiendes cómo tu equipo funciona y organizas el flujo de trabajo para aumentar la productividad.  
  • Siempre estás dispuesto a mejorar. 
  • Eres inmensamente creativo y persistente.  

Como puedes ver todas estas herramientas son las capacidades que todo trabajador valioso posee, por lo que si quieres desarrollarlas puedes hacer un Máster en Coaching, Liderazgo de Equipos y PNL, en el que también aprenderás cómo motivar equipos y aumentar la productividad general. 

Contacta con la más prestigiosa escuela de negocios y empieza a soñar con tu próximo puesto.  

Tipos MBA, cuál debería elegir y por qué

Si has terminado tu carrera, ya tienes unos años trabajando y has decidido que quieres seguir impulsado tu carrera profesional, probablemente en tu búsqueda te hayas encontrado con la palabra MBA y sus versiones executive, global e international.  

Todas lucen interesantes y te pueden ayudar a crecer laboralmente. Tanto que no has podido decidir cuál te conviene más. Si te sientes identificado con esto último, en ENEB te explicaremos las diferencias de cada MBA y porqué te convendría escoger uno sobre otro según tus aspiraciones. 

Qué es un MBA. Por qué son tan populares 

Un MBA o Master in Bussiness Administration (Master en Administración y Dirección de Empresas) es un tipo de estudio superior en el que el alumno consigue un conocimiento profundo y extenso en negocios.  

La diferencia entre los másteres y los MBA es la especialidad del último, ya que fueron concebidos para que el estudiante adquiera habilidades de gerencia y sea capaz de acceder a cargos directivos o emprender en su propio negocio.  

Dada la exigencia del temario, cursar un MBA toma entre uno y dos años, en función de la cantidad de créditos que disponga el programa.  

El área de los negocios es muy amplia y cada vez exige más a los estudiantes que sean polifacéticos y dominen varios campos de conocimiento. Es por ello, que se han desarrollado distintos programas de MBA, según los intereses y las aspiraciones de los profesionale.  

Tipos de MBA 

 Para ayudarte en tu búsqueda desde la Escuela de Negocios Europea de Barcelona, hemos elaborado una lista de todos los tipos de MBA que existen. Primero separaremos los MBA por modalidad y luego por clases. 

Máster MBA Presencial 

El primero que se creó. Se trata de un tipo de estudio superior en el que obtienes una idea general del mundo de los negocios, así como las sinergias que los mueven. Es muy útil para incrementar tus redes de contacto y conocer otros profesionales en activo. 

Suele tener una duración de 1 o 2 años contando el trabajo final de master. 

 Máster MBA Online   

La modalidad más popular de MBA desde la pandemia. Gracias a la digitalización, muchas personas de todas las partes del mundo pueden disfrutar de educación de calidad y profundizar su saber en el área empresarial.  

Otra de las ventajas de este MBA es que el alumno se puede inscribir cuando más le conviene, así como ir realizando los distintos módulos en el momento que desee. De esta forma se consigue una conciliación perfecta entre la vida laboral, educativa y personal. 

No tendrás que renunciar a nada. 

En ENEB somos expertos en este tipo de MBA. Todo nuestro claustro de profesores son profesionales en activo y están dispuestos a ayudar a nuestros estudiantes cuando lo necesiten.  

Además, como queremos que salgas preparado y que el paso de la vida estudiantil a la laboral sea lo más sencillo posible, contamos con una metodología completamente práctica en la que te expondremos a casos reales, para cuando sucedan en tu puesto de trabajo, sepas cómo actuar.  

El resto de los MBA sus subespecialidades y como tal pueden ser presenciales u online.  

Executive MBA 

Este tipo de máster tiene como objetivo que directivos y gerentes de empresa profundicen en sus conocimientos en el ámbito de los negocios y les dé una visión global y transversal de la gestión general. De esta manera, se podrán desenvolver con éxito en puestos gerenciales.  

Para  acceder a este al Executive MBA se debe contar con experiencia previa en puestos de responsabilidad, ya que los contenidos que se imparten son más avanzados que un MBA general. 

Dentro de este tipo de máster, la modalidad más popular es la de Executive MBA online, ya que el alumno puede organizar su ritmo de estudio como quiera. 

International MBA 

Es una MBA especialmente diseñado para aquellos profesionales que quieran trabajar en el exterior o están pesando en expandir su negocio fuera de las fronteras nacional, ya que el International MBA no solo ofrece una visión estrategia y global del mundo de los negocios, sino que enseña sinergias de trabajo típicas de otros países. 

Para acelerar tu carrera laboral internacional, este MBA se impartirá completamente en inglés.  

Global MBA 

Es un nuevo tipo de MBA en el que el estudiante gana una visión holística y profunda de tres campos muy afines entre sí, es decir, al final del proceso educativo, los profesionales obtienen 3 máster, los cuáles certifican su experticia en distintas áreas.  

Dentro del Global MBA el más común es el que contiene un MBA, un Máster en Big Data y Bussiness Intelligence y Máster en Project Management, pero también hay Global MBA en Executive Marketing o Global MBA en Human Resources. 

Teamwork MBA 

Una nueva modalidad completamente nueva e innovadora dentro del paradigma educativo. 

 En el Teamwork MBA el estudiante adquirirá todos los conocimientos del Master de Administración y Dirección de empresas a través del trabajo en equipo, ya sea con personas de tu entorno o con un grupo internacional asignado por la escuela.  

Esto te permitirá obtener una visión estratégica y global del trabajo de un directivo a la vez que aprendes habilidades de comunicación exitosas de una manera natural y fluida.  

Si estas interesado en alguno de nuestros MBA no dudes en contactar la mejor escuela de negocios. En ENEB queremos que acelera