Emprender en 5 pasos, ¿es posible?

Con el emprendimiento en pleno auge todo el mundo quiere aventurarse con su proyecto, pero a veces pecamos de desconocimiento.

El primer paso antes de emprender es ser plenamente consciente de ello; el camino que queda por recorrer es largo. El tiempo es limitado, así que la decisión de poner en marcha nuestra idea o no, puede ser la más difícil e importante.

Una vez encaminados, nuestra curiosidad, pasión, motivación, lectura, etc., pueden ser claves para definir el objetivo con el que ayudemos al consumidor aportándole un valor añadido. Obviamente, la idea tiene que motivarnos ya que nos tocará invertir muchas horas. Por lo tanto, no sólo bastará con identificar algo que realmente nos agrade, sino que también tengamos un cierto conocimiento. El actual consumidor es muy exigente.

El tercer paso es la formación de un buen equipo. Ya lo dicen, “si quieres ir rápido, camina solo; pero si quieres llegar lejos, camina acompañado”.

Pero, ¿cómo formamos un equipo? Más allá de sus habilidades y experiencia, también hay que tener en cuenta los valores, emociones y motivación por el proyecto. Compartir los mismos valores y que se identifiquen con el proyecto. Muchas veces el problema está en que empezamos a buscar skills en lugar de los valores e intentamos compensar la motivación a base de salario. No obstante, a la larga esa persona inevitablemente se irá desmotivando.

El cuarto paso del emprendedor es, posiblemente, el más difícil: buscar financiación. Es complicado emprender sin tener cierta libertad financiera, y eso no significa ser rico. Una persona que tiene menos posesiones pero no tiene cadenas en cuanto a hipotecas, préstamos, etc. tiene un grado mayor de libertad financiera que otra persona hipotecada. En el caso de no tener recursos propios, una buena alternativa es buscar inversores.

Está claro que a lo largo de la vida de la empresa habrá que ir añadiendo los conocimientos suficientes que se necesiten. Por lo tanto, aportar las skills (habilidades) necesarias para el desarrollo del proyecto puede ser el quinto paso. El aprendizaje es clave.

Generalmente el emprendedor se toma la vida como un camino de aprendizaje, una actitud vital, no existe el fracaso sino el aprendizaje. Crecer como persona y como profesional. Es más, en Estados Unidos, un país con una enorme tasa de emprendedores, el fracaso está bien visto. Se considera una experiencia muy valiosa para los próximos negocios. ¿Emprendemos?

El motor del modelo de negocio

Actualmente crear una empresa no es tarea fácil. De hecho, nunca lo ha sido. Lograr reunir recursos financieros, humanos, tecnológicos, de producto, etc., y, además, añadir una propuesta de valor en el mercado es realmente difícil.

Está claro que lo complicado de todo este engranaje es el motor; el modelo de negocio.

¿Y cómo definimos esta propuesta de valor? La primera respuesta que se nos puede pasar por la cabeza escubriendo una necesidad del consumidor, es decir, ayudando a los demás. Se trata de montar un engranaje para cubrir una necesidad y, consecuentemente, obtener unos ingresos a partir de una actividad que realmente nos apasione, si puede ser.

A día de hoy las empresas que tienen éxito son las que se focalizan en esto, sin añadir líneas de negocio que distorsionen la propuesta de valor del negocio. Buscan consolidar la empresa.

En el momento que se pierde el hilo y diversificamos nuestra propuesta de valor podemos caer en el espantoso terreno del fracaso.

La filosofía de las empresas exitosas pasa por evolucionar constantemente la manera de cubrir las necesidades, aportar una mejor calidad al consumidor siempre adaptándose a él; el cliente manda.

Ejemplos de este modelo son Starbucks, Mercadona o McDonald’s. El último readaptó su color corporativo; del rojo al verde, o lo que es lo mismo, de la hamburguesa cero saludable a las ensaladas healthy que tan de moda están entre los actuales consumidores. El producto es circunstancial. Lo importante es el modelo, el engranaje de nuestra organización.

Los 5 secretos para ser un buen líder

Escucha activa

Un buen líder es aquel que escucha a sus colaboradores, valora sus opiniones y hace suya aquella que le parezcan apropiadas o que vayan a generar una mejoría en su equipo.

Decisión

El líder escucha y medita, pero sobretodo decide. Un buen líder no debe dudar de sus decisiones una vez tomadas, si cambiar el rumbo de éstas si ve que no son apropiadas.

Empatía

Los líderes carismáticos y genuinos que tienen una personalidad agradable tienden a mejorar el sentido de liderazgo. Las personas que tienen una personalidad magnética son tratados como líderes por su forma de ser aunque les falte una o varias cualidades, la escucha activa y ponerse en el lugar del otro ayudará al líder a que sus cooperantes trabajen mejor.

Dotes de motivación

Un buen líder sabe aprovechar al máximo las cualidades de su equipo y potenciarlas al más alto nivel. Un equipo motivado es un equipo con resultados.

Visión de éxito

La palabra fracaso se traduce en aprendizaje si las cosas no salen como uno pudiera esperar. Un buen líder solo encuentra el éxito en cada proyecto, llegue o no, a los objetivos planteados desde un inicio.

¿Cómo es el nuevo consumidor?

Vivimos en un mundo globalizado. El comercio tradicional ha dado paso a una economía de mercado globalizada y estandarizada que busca incansablemente la captación de nuevos clientes. Aquí es donde la figura del “costumer care” cobra más relevancia. ¿Por qué elegir una marca y no otra? ¿Por la calidad? ¿Por su cantidad? ¿O por cómo me tratan?

Evaluar la satisfacción del cliente es ya habitual en la gestión empresarial. La normativa ISO 9001 lo incluye como requisito y el modelo EFQM lo considera el criterio de mayor peso específico según el Ministerio de Fomento y las últimas tendencias del consumidor. La confianza y el trato que recibe de la marca acaban siendo un factor determinante en su elección.

La atención al cliente se torna indispensable en el nuevo tablero de juego de las empresas, tratar bien al cliente, darle respuesta y aun más importante, solucionar sus problemas es condición ya indispensable para las empresas si quieren mantener su status quo de liderazgo.

Pero… ¿esto es así? ¿Las grandes marcas realmente tratan y miman a sus clientes? Está abierto el debate.

Alternativas reales a las medidas de austeridad

Tal y como anunciaba el profesor Joseph Stiglitz, Premio Nobel de Economía y ex economista jefe del Banco Mundial, las medidas de austeridad no funcionan. La austeridad contribuye a unas balanzas fiscales ridículas y a la parálisis de la economía. ¿Hay alternativa?

Fijémonos en el caso de Islandia. No podemos generalizar ya que las particularidades de cada mercado y economía son diferentes pero Islandia ha reducido el paro al 4% en 2014 con una subida de sueldos del 6% según el último informe del Fondo Monetario Internacional (FMI).

¿Cómo? Decidió no salvar a los bancos en contra de la corriente y los consejos europeos. En su lugar, ha sufrido un crecimiento de la economía propiciados por el sector del turismo y la pesca, contribuyendo a un crecimiento del 3% de este país.

El debate que aquí se abre es si los focos o pilares de la economía moderna son los adecuados y si estos pueden propiciar un sistema sostenible o bien una remodelación del sistema puede ayudarnos a corregir los fallos de éste: nuevo escenario, nuevas reglas del juego.

Nuevas tendencias: El consumidor omnichannel

Empresas distintas y más sofisticadas, ese es el futuro. Aprovechar al máximo las oportunidades que ofrecen las tecnologías móviles se está convirtiendo en un elemento clave para el nuevo consumidor.

El informe Total Retail 2015, elaborado por PwC a partir de entrevistas a 19.000 consumidores sobre sus preferencias y hábitos de compra, concluye que las exigencias del nuevo consumidor está obligando a las compañías a transformar sus modelos de negocios y sus estrategias de relación con los clientes.

Cada vez es más habitual que el consumidor vaya a comprar físicamente los productos que necesita acompañado de su móvil o tablet, comparando precios y navegando in situ por las plataformas del propio negocio. A éste se le llama ‘cliente omnichanel’.

Es por ello que se ha vuelto tan importante el papel del community manager así como del experto en plataformas y técnicas de eCommerce, dos nuevas figuras cada vez más populares e imprescindibles para las empresas que quieren potenciar la multicanalidad tanto en la preventa, venta y postventa que demanda el nuevo consumidor.

La Escuela de Negocios Europea de Barcelona apuesta claramente por estas figuras tan indispensables con su doble titulación MBA + Máster en Marketing Digital y eCommerce, en la que los profesionales adquieren la capacitación adecuada para cubrir las nuevas necesidades de la empresa actual y del nuevo consumidor multicanal.

El motor de la empresa actual: El capital humano

La globalización, la competitividad y los avances tecnológicos han provocado un cambio sustancial en la manera de entender los mercados. Las estrategias tradicionales se han visto obligadas a evolucionar, la recopilación de datos se ha vuelto uno de los ejes esenciales en las empresas y su capital humano el principal motor de crecimiento.

Los directivos de Recursos Humanos no pueden ser solo gestores de personal, deben captar, motivar y explotar el talento de los propios integrantes de la organización porque es a través de éstos que conseguirán una de sus principales ventajas competitivas, desde la base hasta gerencia.

Es por ello que en todos los Másters de ENEB se incluye Coaching y PNL para directivos, las mejores herramientas para aprovechar el capital humano en la empresa que, en definitiva, es el éxito de cualquier organización.